Han subido fuerte los tipos, sí, pero no en todas partes igual. Los bonos basura por ejemplo (High Yield, barra de la izquierda), están justo en la media de los últimos 10 años, y más cerca del mínimo que del máximo: hay margen.
En cambio los tipos de los bonos soberanos son los que más cerca están de máximos y por encima de la media, junto con los corporativos.
Para comprender lo que ocurre, construir tu escenario de mercado, y diseñar una estrategia de inversión coherente.